El centro del consumo mundial se está desplazando con claridad. En México y en economías similares, la generación X personas nacidas entre 1965 y 1980 se consolida como el grupo de mayor relevancia para el gasto de los hogares y la demanda de productos y servicios a escala global. Según proyecciones de la consultora Euromonitor International, este segmento será el principal motor del consumo en el mundo hasta 2033.
Este fenómeno se explica por una combinación de factores demográficos, sociales y económicos. La generación X representa actualmente más de 1,200 millones de personas a nivel global. En países como México, se trata de individuos en plena madurez laboral, con altos niveles de ingreso y un fuerte poder de decisión en el entorno familiar y profesional. Su perfil los convierte en consumidores estratégicos: priorizan calidad, valor agregado y experiencias personalizadas por encima de lo masivo o genérico.
Estrategias de mercado para consumidores exigentes
Además, las previsiones indican que este grupo dominará el 40% del gasto mundial en la próxima década. Este dato modifica los supuestos tradicionales del marketing, que en años recientes se enfocó casi exclusivamente en millennials y centennials. Las marcas deberán redefinir su segmentación para alinearse con las prioridades y hábitos de consumo de la generación X, especialmente en áreas como salud, tecnología, educación continua y servicios financieros.
De igual manera, se anticipa que esta generación jugará un papel determinante en la adopción de modelos híbridos de trabajo y en la demanda de soluciones orientadas a la planificación patrimonial.
A diferencia de generaciones más jóvenes, los consumidores de la generación X están menos expuestos a situaciones de subempleo y presentan mayor estabilidad económica. De hecho, su nivel de endeudamiento es inferior al promedio regional, lo que refuerza su papel como grupo clave para la sostenibilidad del mercado interno.
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