El lanzamiento en Estados Unidos de las nuevas gafas inteligentes Ray-Ban Display con inteligencia artificial integrada confirma la apuesta de Meta por consolidar un ecosistema tecnológico propio. Este movimiento no solo responde a la competencia creciente en el mercado de dispositivos portátiles, sino también a la necesidad de diversificar las fuentes de ingresos de la compañía.
La integración de asistentes de voz y visión computarizada en un accesorio de uso cotidiano introduce una capa adicional de interacción con el entorno físico y digital. Además, fortalece el vínculo de Meta con el consumidor final en un momento en el que los márgenes de la publicidad digital se han estrechado.
Gafas inteligentes y la evolución del mercado tecnológico
Las gafas inteligentes Ray-Ban, desarrolladas en colaboración con EssilorLuxottica, incorporan un microdisplay y capacidades de inteligencia artificial capaces de procesar información en tiempo real. Este avance abre un segmento de mercado donde la usabilidad se combina con la discreción estética, lo cual se convierte en un diferenciador frente a competidores centrados en dispositivos más voluminosos.
Por otro lado, la estrategia de Meta revela un esfuerzo por reducir dependencia de los ingresos tradicionales, apostando por hardware que amplía la interacción con la IA generativa. En consecuencia, esta innovación puede reconfigurar tanto la experiencia del usuario como los modelos de negocio futuros en el sector tecnológico.
La distribución inicial en tiendas de Estados Unidos y Europa apunta a una expansión gradual en mercados estratégicos.
Este despliegue controlado permite evaluar la aceptación del consumidor, al tiempo que posiciona a Meta en el competitivo terreno de la computación vestible.
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