La competencia entre bancos en España por atraer planes de pensiones ajenos se intensifica, impulsada por una baja rentabilidad estructural y la presión comercial en la red. Las entidades están elevando las bonificaciones por traspaso hasta un 6%, con el objetivo de captar nuevo patrimonio gestionado y mejorar sus indicadores de negocio, especialmente ante la dificultad de generar ingresos por comisiones en otros productos de inversión.
Banca española impulsa incentivos por planes de pensiones
A partir de agosto de 2025, entidades como BBVA, Santander y CaixaBank han activado campañas agresivas para captar planes de pensiones procedentes de otras gestoras. El atractivo comercial se traduce en bonificaciones que oscilan entre el 3% y el 6% del importe traspasado, condicionado generalmente a una permanencia mínima de entre 3 y 8 años, dependiendo de la entidad. Esta estrategia busca reforzar el negocio de ahorro-previsión en un contexto de tipos de interés estabilizados y menor rentabilidad por depósitos tradicionales.
En particular, BBVA ofrece hasta un 6% de bonificación en traspasos superiores a 25.000 euros, con compromisos de permanencia más exigentes, mientras que Santander y CaixaBank aplican esquemas similares con ligeras variaciones en los montos y condiciones. La tendencia evidencia un movimiento táctico para conservar volumen gestionado, ante la competencia creciente de fondos indexados y productos aseguradores.
Impacto comercial y contexto regulatorio
Además del atractivo monetario, los bancos refuerzan su propuesta de valor a través de herramientas digitales y asesoramiento personalizado, elementos cada vez más relevantes para los partícipes que buscan transparencia, diversificación y costes competitivos. Si bien las bonificaciones pueden representar una ventaja inmediata, los compromisos contractuales a largo plazo limitan la movilidad del cliente y refuerzan la fidelización forzada.










