El consumo privado en México muestra señales de recuperación sostenida. Una muestra clara es la derrama económica generada por el Buen Fin 2025, que alcanzó los 152 mil millones de pesos, un incremento real del 21% frente a los resultados obtenidos en la edición de 2024.
Este crecimiento refleja no solo una mejoría en la confianza del consumidor, sino también el efecto combinado de factores como el aumento en transacciones electrónicas, la ampliación de la cobertura comercial y la incorporación de pequeñas y medianas empresas al esquema de descuentos. El programa, celebrado del 17 al 20 de noviembre, consolidó su peso como catalizador del consumo interno en un entorno económico aún marcado por presiones inflacionarias y restricciones en el gasto público.
Digitalización impulsa ventas en el Buen Fin
La digitalización del comercio fue uno de los motores más relevantes del repunte. Datos de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) confirman que más de 85 mil empresas participaron en esta edición, muchas de ellas con plataformas de venta en línea optimizadas, lo que permitió a consumidores acceder a promociones sin restricciones geográficas.
Además, el uso de medios de pago electrónicos superó los 29 millones de operaciones, reflejando una mayor inclusión financiera y eficiencia operativa del sector retail. En términos sectoriales, las mayores concentraciones de ventas se observaron en electrodomésticos, electrónica personal y viajes, lo que confirma la recuperación del gasto discrecional.
Este desempeño supera ampliamente las expectativas del sector privado y fortalece la percepción del Buen Fin como un instrumento de política económica indirecta.
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