Los precios del oro en México registraron un ascenso histórico esta semana, impulsados por la incertidumbre generada tras el cierre del gobierno estadounidense y la falta de aprobación de un proyecto de ley de gastos. Este contexto elevó la demanda de metales preciosos como refugio seguro frente a la volatilidad política y financiera. Además, desde finales de 2024, el metal ha mantenido una tendencia alcista con breves correcciones que no han detenido su impulso.
Perspectivas positivas para el oro en 2026
Expertos coinciden en que el mercado del oro mantendrá su fuerza durante los próximos meses. John McCluskey, CEO de Alamos Gold, destacó que las adquisiciones estratégicas realizadas entre 2015 y 2017 y la ampliación de reservas han posicionado a la empresa para generar valor ante máximos históricos.
Del mismo modo, Max Baecker de American Hartford Gold anticipa que la combinación de gasto gubernamental elevado, desaceleración económica y posibles recortes de tasas por parte de la Reserva Federal sostendrán la demanda de oro hacia 2026.
Expectativas de precios en el corto plazo
El impulso actual del oro refleja también la dinámica global de los bancos centrales, quienes continúan adquiriendo reservas de este metal para diversificar sus activos. De acuerdo con analistas, el oro podría sostener niveles superiores a $3,800 la onza en el corto plazo, consolidando su rol como instrumento de preservación de capital frente a la incertidumbre geopolítica y económica.