En la última década, las tres automotrices estadounidenses (General Motors, Ford y Stellantis) no sólo perdieron participación de ventas en el mercado mexicano con la llegada de nuevas marcas asiáticas, sino que redujeron entre 10 a 40 puntos porcentuales la comercialización de autos hechos en México reveló Urban Science Latinoamérica.
En contraste, las marcas asiáticas (Toyota, KIA y Mazda) lograron aumentar su presencia en el mercado mexicano y con la instalación de plantas de manufactura consolidaron su venta de autos hechos en México.
Aun cuando las tres cuentan con fábricas de producción en México y que lograron ampliar inversiones para crecer el ensamble, perdieron ventas de autos de origen mexicano y procedieron a privilegiar la comercialización de vehículos de otros destinos como China, como fue el caso de General Motors; de Estados Unidos, Ford; y de Brasil, el caso de Stellantis.
De acuerdo con el análisis de ventas de autos chinos en México realizado por Urban Science, el 53% de autos que vendía General Motors eran manufacturados en territorio mexicano durante el periodo de enero a junio del 2016; mientras que al primer semestre del 2025, la estrategia cambió, para comercializar sólo 11% hecho en México.