«Uber no cumplió los requisitos del RGPD para garantizar el nivel de protección a los datos transferidos a Estados Unidos», señaló en un comunicado el presidente del organismo, Aleid Wolfsen, considerando que «es muy grave».
Según la autoridad neerlandesa, Uber recopiló información sensible de conductores europeos, incluido licencias de taxi, datos de localización, fotos, detalles de pago, documentos de identidad, «y en algunos casos incluso datos penales y médicos».
Durante un periodo de dos años, la información se mandó a la sede de la compañía en Estados Unidos sin usar las herramientas adecuadas, criticó la agencia regulatoria.