La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, afirmó que es posible que la industria de la moda pueda establecer nuevas prácticas de trabajo con las comunidades originarias.
«Nada sin ellas, y siempre que ellas así lo decidan, donde ambas partes resulten beneficiadas e invitó a generar una nueva conciencia sobre la apropiación cultural y buscar modelos de colaboración a través del diálogo y el respeto».
Esto lo dijo al participar en la conversación titulada “Dónde se ha equivocado la industria de la moda con la apropiación cultural”, que se llevó a cabo este 24 de marzo en el Foro Diversidad, del grupo Fairchild Media, presentado por la revista especializada WWD.
“La palabra telar para nosotros es fundamental; a veces se teje con las manos, atado a la cintura, las manos se mueven desde el corazón hasta el ombligo y así se va tejiendo la urdimbre, un material fuerte, colaborativo, que nos va a proteger. Así, de la mano de las y los creadores tradicionales se puede trabajar, busquemos esta ética, esta posibilidad de tejer juntos un futuro para la moda más coherente para las comunidades, con mucho mayor justicia”, afirmó.
Organizado en línea por la revista estadounidense Women’s Wear Daily (WWD), un referente en la industria de la moda, el foro tuvo el objetivo de reunir a empresas y líderes del sector para analizar y trazar una nueva hoja de ruta que permita encontrar mecanismos de inclusión y diversidad en el sector.
En el diálogo que la secretaria Alejandra Frausto Guerrero sostuvo con el director de moda masculina y femenina de WWD y WWD.com, Alex Badia, la encargada de la política cultural del país explicó que diseñadores y marcas internacionales han mostrado interés en las creaciones de artistas tradicionales de México.
«Son culturas vivas y recordó que ante algunos casos de apropiación cultural indebida, la dependencia a su cargo ha roto el silencio pidiendo una explicación a las marcas que realizan esas prácticas, además de invitarlas a dialogar con las comunidades afectadas, a fin de establecer nuevos vínculos de colaboración, desde el respeto».
“Al escuchar y conocer a las comunidades las van a respetar mucho más, van a entender que lo que está ahí es un valor cultural profundo; que podrían, a partir de buenas prácticas, justamente en estos lugares donde existe esta riqueza cultural pero una marginación económica grande, pueden hacer una aportación a una humanidad más justa, pueden hacer una gran aportación a desarrollar trabajo de la mano de las comunidades si ellas así lo quieren y creo que nosotros abrimos estos espacios de diálogo”, comentó Frausto Guerrero.
En ese sentido, puso como ejemplo a la empresa Louis Vuitton, que aceptó la invitación al diálogo con las comunidades, luego de recibir una carta de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México ante un caso de apropiación cultural, así como a la multinacional Nike, que buscó de manera directa a la dependencia para tender el puente hacia las comunidades artesanales a fin de diseñar una colección especial.
“Nosotros tendemos este puente para que dialoguen y lleguen a un trato justo, a un proyecto que se pueda desarrollar. Una colección que seguramente tendrá gran éxito en el mercado desde el respeto, el reconocimiento, la colaboración, desde una situación mucho más pareja”, dijo.
Y agregó, “tenemos una extraordinaria riqueza cultural, no es que se llegue y se compre, es un trabajo ético de creador a creador, desde la propia comunidad con otro creador de otro continente, de otra cultura”. De igual forma, explicó que se busca que las y los creadores tradicionales puedan viajar a otros países e interactuar con las y los diseñadores, puesto que son eslabones de la misma cadena de la industria de la moda.