El dólar tocó este jueves su nivel más bajo desde abril, encaminándose a su mayor caída semanal en lo que va del año, por los datos de la inflación. Los operadores consideraban que la baja inflación es una señal de que las tasas en Estados Unidos podrían alcanzar su nivel máximo este mes.
Según los precios al consumidor, la inflación se desaceleró mucho más rápido de lo esperado el mes pasado. Esto dio lugar a la mayor venta de dólares en un día en cinco meses. Lo anterior se ubicó en su nivel más bajo en más de un año frente al euro y la libra esterlina. Incluso en su nivel más bajo en más de ocho años frente al franco suizo.
La inflación subyacente estadounidense subió en 0.2% en junio, frente a la expectativa de 0.3%, mientras que el IPC general anual marcó 3%.
Los futuros de las tasas de interés mostraron que los mercados han descontado totalmente otra subida de tasas por parte del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) a finales de este mes, pero las expectativas de nuevas subidas se han evaporado.
La reducción de la brecha entre las tasas de interés en Estados Unidos y el resto del mundo impulsaba a otras divisas frente al dólar, especialmente al euro, la libra esterlina y el yen.