México 10 enero._ La caída de más de un US$1 billón en el índice compuesto Nasdaq (CCMPDL) durante la primera semana de 2022 ha hecho que algunas de las acciones más costosas pierdan 10% o más. Pero la baja de los índices de referencia desde los récords del año pasado aún no ha alcanzado los dos dígitos.
La venta masiva de acciones tecnológicas costosas puede estar lejos de terminar debido a que los rendimientos de los bonos, la mayor amenaza para las acciones de alto crecimiento, registran nuevos máximos posteriores al inicio de la pandemia.
El Nasdaq 100 caía cerca de un 2% este lunes, mientras que los rendimientos del Tesoro a 10 años subía hasta el 1,8%. Lululemon Athletica Inc. (LULU) se desplomó cuando el fabricante de pantalones de yoga dijo que la variante ómicron estaba limitando sus operaciones.
Mientras que Torrid Holdings Inc. (CURV) se desplomó después de que el minorista de ropa femenina de tallas grandes recortara su previsión de ventas debido a que la variante causó interrupciones en su plantilla.
El bitcoin (XBT) caía por quinta vez en seis sesiones, lo que lo sitúa en el peor comienzo de año desde los primeros días de la alternativa digital al dinero.
“Nunca hemos visto acciones tan caras para el mercado en general, lo que significa que es probable que las valoraciones bajen más antes de que terminemos con esta corrección”, escribió Michael J. Wilson de Morgan Stanley en una nota a los clientes. Para Wilson, las acciones de software más afectadas deberían tener un rendimiento aún peor por la caída esperada de las ganancias y, en general, las acciones “todavía deben registrar bajas importantes” antes de que termine el retroceso.
Las acciones de empresas de software han sido unas de las más afectadas por los temores de que las mayores tasas de interés continúen socavando sus valoraciones, que se basan en ganancias que se espera obtener en el futuro lejano. Wilson dijo que no recomendaría a los inversionistas que ingresen al sector hasta que los resultados del cuarto trimestre brinden claridad sobre si las revisiones de ganancias han tocado fondo.
Fuente: Bloomberg