Antonio Bellorín, director nacional de Riesgo y Seguridad en el Tec de Monterrey, señaló que la extorsión telefónica es una amenaza que ha ido en aumento.
“La extorsión telefónica es un tipo de fraude en la que una persona a través de una llamada telefónica nos amenaza, engaña o intimida con el fin de obtener dinero u otros beneficios”, dijo Bellorín.
Los delincuentes han adoptado esta modalidad por el bajo riesgo en ser detenido y el resultado que obtienen muchas veces.
Los casos más comunes son llamadas de un supuesto familiar que está en apuros o secuestrado, amenazas de un supuesto grupo delictivo o autoridades, así como advertencias de suspender tu línea telefónica por fallas.
Engaños
Mediante engaños buscarán alarmarte con la intención de obtener tu información personal o dinero.
“Entre las extorsiones más comunes, a las víctimas les hacen creer que su familia se encuentra en peligro”, explicó el experto.
A continuación, los delincuentes dan información precisa de la víctima, y bajo amenazas, obligan a que no cuelgues.
Mientras esto sucede, los agresores pueden llamar a otro familiar para indicarles que deben transferir dinero a cuentas, generalmente de bancos pequeños, para supuestamente evitar lo que les dicen en el engaño.
En algunos casos, los extorsionadores mantienen a la víctima completamente incomunicada, evitando que reciba mensajes de WhatsApp, o también obligan a cederles el control de teléfono.